LA AUTORA DICE:
En el año 2015 leí un artículo que decía que el 80% de las mujeres que trabajaban como trabajadoras sexuales habían sufrido abusos durante su infancia. Y que ejercer como trabajadoras sexuales les activaba algunos mecanismos psíquicos con el fin de intentar asimilar el trauma. Trauma que evidentemente tampoco lograban asimilar porque la actividad a la que se dedicaban desencadenaba otros y las empujaba a caer en un círculo infinito y deshumanizante. Me pareció perverso.
Esta obra nace de la necesidad de dar voz a la realidad de la prostitución, donde las mujeres que se dedican a ella voluntariamente son una minoría.
En esta obra la palabra «PUTA» no aparece; será sustituida por la palabra DONA.
EL DIRECTOR DICE:
DONA de Queralt Riera es un texto arriesgado. Y la propuesta que veréis en La Caldera es una literatura que hace pensar en Jan Fabre, en Rodrigo Garcia, Sarah Kane, el “Susn” de Herbert Achternbusch. Un texto culto, como todos los textos de Queralt, lleno de referencias culturales que se nutre de nuestros mitos y avanza con paso firme hacia la actualidad. Un ejercicio de literatura y estilo. Un texto en el que la poesía, el movimiento y el teatro se dan la mano. Y hablando de mitos atávicos, este teatro enraizado, pasional, no nace del hígado como decían los griegos, sino de la vagina. De la vagina de la autora y de todas las mujeres y hombres que pensamos que un mundo mejor pasa por ser un mundo descaradamente feminista.